Amy Baxter (Hassick) y Maggie Giddens han tomado una trayectoria similar en su camino para llegar al mayor nivel de arbitraje internacional de hockey, aunque Amy llegó a la cima un poco antes. Sus posiciones como árbitros internacionales seniors, las convierte en una pieza fundamental para las ambiciones PAHF de elevar el nivel del juego en todo el continente.
Ambas comenzaron sus carreras de hockey como jugadores y entrenadores antes de descubrir su talento y entusiasmo por el arbitraje. Hablar con dos mujeres de sus esperanzas, sueños, ambiciones y logros como árbitros es desenterrar a dos personas muy apasionadas por el deporte como cualquier jugador o entrenador. Amy habla sobre el partido de Gran Bretaña el cual tuvo la oportunidad de arbitrar en los Juegos Olímpicos de Londres 2012, ella dice recuerda el momento en el que pisó en el campo de juego como si fuera ayer y todavía le da la piel de gallina. Por otro lado, Maggie recuerda un partido el cual arbitró a principio de su carrera entre Australia y Nueva Zelanda, las lágrimas que se alinean en sus ojos mientras habla, son una demostración del inmenso orgullo que siente cada vez que tiene una gran actuación arbitrando.
"Fui entrenadora durante tres años", dice Amy mientras explica cómo encontró su camino en el arbitraje. "Necesitaba un descanso así que me tomé un año. Pero extrañaba el hockey y quería seguir involucrada. Así que fui a una clínica de verano para árbitros y me encantó. Comencé a arbitrar en escuelas, iba pedaleando, caminando o en el autobús, no importaba como, iba, iría y arbitraría. Para ese momento ya había ganado experiencia, así que comencé a arbitrar juegos nocturnos en las escuelas locales. Hice dos años de eso y luego comenzó mi carrera en el arbitraje universitario. "
En el 2001 y con 31 años de edad, Amy comenzó su carrera de árbitro, donde ella dice que estaba comenzando relativamente tarde, ya que la mayoría de árbitros internacionales empiezan a arbitrar partidos de primer nivel durante sus 20 años. Esto explica por qué Amy se lanzó tan plenamente en la búsqueda de su sueño. Fue realmente un ascenso rápido, "Fue un poco de suerte", dice. "Hubo algunas carencias en el circuito de la escuela secundaria y la universidad, por lo que necesitaban nuevos árbitros, pero creo que vieron un poquito de talento, y luego llego el 'boom'".
Tras dos años como arbitro, Amy asistió a una clínica de arbitraje de hockey sala. Su habilidad para leer el juego y administrar a los jugadores fue detectada por el arbitro retirado, Steve Simpson, el cual la desafió a alcanzar el siguiente nivel. Cuatro años más tarde se había incorporado al arbitraje internacional; Su primer torneo fue cuatro naciones en Chile entre Argentina, Estados Unidos, Chile y Alemania.
"Fui un desastre!" Dice Amy riéndose "Me caí, me tropecé con las banderas, pero fue una gran experiencia. Tres meses más tarde me encontré arbitrando los Juegos Panamericanos, de ahí en adelante fui a todos los torneos los cuales el equipo de Estados Unidos participó".
Para facilitar su floreciente carrera como árbitro, Amy tuvo que tomar algunas decisiones difíciles. Un árbitro internacional puede estar fuera de casa durante muchas semanas del año y, aunque sus empleadores apoyaron, llegó un punto en el que Amy admitió que lo justo era dejar su trabajo como maestra. Una conversación con su marido la convenció de que debía perseguir sus sueños de arbitrar los Juegos Olímpicos y así fue como Amy se convirtió todo en un árbitro internacional al 100%.
"Yo era significativamente mayor que muchos otros árbitros, así que sabía que tenía un lapso de tiempo limitado, fui a todos los torneos que me invitaron, sabia que los Juegos Olímpicos de Londres estaban a tres años de distancia, así que era una oportunidad que tenia que tomar".
Ocho años más tarde, Amy tiene dos Juegos Olímpicos y dos Copas Mundiales en su haber, demostrando la sabiduría de su elección.
Para Maggie, el progreso fue igualmente rápido. En 2006 fue entrenadora en un torneo de la Universidad de Michigan donde hubo escasez de árbitros. Sacó provecho de esta brecha y pronto ingresó en el arbitraje de escuelas. Fue asesorada por Gus Soteriades y su talento pronto fue reconocido y recompensado. Apenas un año después de comenzar, Maggie se dirigía a los Países Bajos para arbitrar su primer evento internacional y dos años más tarde, en el Campeonato Sudamericano de Río de Janeiro, obtuvo una mención internacional de la Federación Internacional de Hockey (FIH).
"Desde entonces, he estado en 15 o 16 países ", dice Maggie, quien es consultora de fitness en Nueva York. "Ha sido un torbellino, pero he amado cada minuto".
El árbitro de Brooklyn se ríe cuando dice que la gente suele preguntarle si aspira a ser entrenadora, pero también hay una molestia persistente que, para algunas personas, el arbitraje es una carrera de segunda categoría en el deporte. "No", dice ella, "soy un árbitro al 100%. solía ser entrenadora y no me gustó.
"Lo que me encanta del arbitraje es no es tener un apego emocional con el equipo, sino que simplemente disfrutas del juego, eso es lo que realmente me gusta y hacer bien mi trabajo para que el flujo de juego salga bien. Cada uno sabe la manera de mantener la ventaja, cuando el jugador convierte un gol y luego existe ese contacto visual con el jugador – ese es el tipo de momento que me da los escalofríos, es un gran momento en un partido. Esos son los momentos para los que yo arbitro. Nuestro trabajo no es solamente marcar faltas, se trata de entender el juego y hacer de este un buen partido. "
Ambos árbitros también están comprometidos a elevar el nivel de arbitraje, y los niveles de hockey en general, tanto en los EE.UU. como en la región PAHF. Ninguna tiene un papel oficial en la formación de árbitros, pero, Steve Simpson y Gus Soteriades, siempre están en busca de talentos nuevos y están felices de compartir sus conocimientos con los árbitros locales y regionales.
Amy es miembro de la asociación local de árbitros en Nueva Inglaterra y ella transmite información que ha recolectado de su experiencia en la FIH, pero como ella dice, en el nivel superior, las cosas están cambiando constantemente y es imposible transmitir todo a la vez. "Es un proceso de pasos pequeños, el juego puede ser un poco abrumador por lo que sólo comparto pequeños fragmentos a la vez."
Para la próxima Copa Panamericana, Maggie tomará un papel de líder como una de las más fuertes del equipo de árbitros senior. Sus recientes experiencias en el arbitraje en la primera ronda de la liga mundial de hockey en México y Uruguay la han estimulado para hacer más y más eventos PAHF. "Ser capaz de devolverle algo a tu deporte es algo muy especial", dice. "Siempre trato de guiar por el ejemplo, trato de mostrar a los árbitros más jóvenes cuál es el estándar y ayudarlos a lograr eso. Estuve en Salamanca, México para la primera ronda de la liga mundial, y también he participado de un par de partidos de la Segunda Ronda. Estoy en este momento participando de una semifinal por lo que estoy recibiendo un espectro completo y me está dando una experiencia y visión única.
"Realmente creo que no importa el nivel, los jugadores merecen el mismo mejor nivel de arbitraje. Estoy ansiosa por mi primer Copa Panamericana en agosto. Estoy emocionada, especialmente después de la semifinal de la liga mundial en Bruselas, Bélgica.
Ambas Amy y Maggie comparten la misma creencia que el hockey de las naciones PAHF de menor ranking sólo puede mejorar con más experiencia internacional. Amy lo compara con sus propias experiencias como árbitro. "Necesitas salir de tu zona de comodidad, por ejemplo el hockey local en los Estados Unidos está creciendo exponencialmente, jugar un de torneo mas abarcativo es la manera de mejorar".
Maggie está de acuerdo: "La única manera de que los estándares de PAHF crezcan y cambien es que los equipos y árbitros salgan de la región." Uno de lo torneos más divertidos fue la Segunda Ronda HWL en Uruguay, donde participaron países como Azerbaiyán y Francia. Los equipos de la PAHF nunca jugaron contra esos equipos por lo que fue un cambio de estilo y empujó a los jugadores fuera de su zona de confort ".
La llegada de la Hockey Pro League en 2019 es algo que ambos árbitros están observando con interés. Amy expresa cierta preocupación sobre la Hockey Pro League sin saber donde podría dejar el desarrollo de algunos de los equipos de menor ranking. "La Liga Mundial de Hockey me encanta porque ha permitido que los equipos de menor ranking salgan de allí, eso nunca habría ocurrido antes, estoy interesada en ver cómo van a ir las cosas en el futuro en la Pro League y cómo afectará a estos equipos más pequeños. Sé que hay muchos acontecimientos sucediendo y realmente espero que estos desarrollos permitan que las naciones de menor ranking continúen progresando ".
Hay un respeto inmenso entre los dos árbitros. Amy está visiblemente emocionada cuando escucha hablar a Maggie: "Lo voy decir, seguí la carrera de arbitraje de Amy desde muy temprano. En 2009, en la Copa del Mundo Juvenil en Boston, fui árbitro de enlace y Amy tuvo un torneo asombroso, aprendí mucho viéndola, iría tan lejos como para decir que la estaba "idolatrando".
"Es su energía en el campo: somos similares en estatura, pero su presencia es tal que ella parece ser más alta de lo que es. Recuerdo temprano que Amy me enseñó a entrar en el círculo y tocar el poste de meta. Me enseño a ser valiente y ponerme en el centro de la acción ".
La entrevista iba llegando a su fin, le pregunté a Amy sobre su legendaria 'auto-charla'. Amy se sonroja: "Una de mis cosas fue la" auto-charla ", que estuvo bien hasta que empezaron a poner micrófonos en nosotros. Yo estaba en la Copa del Mundo en Rosario en 2010 y había un micrófono tendido sobre mi lado, yo estaba corriendo hacia atrás y tropecé sobre él y me caí, dejé ir algunas palabras de elección y, por supuesto, fue transmitido en vivo. ¡Ahora, tengo que enseñarme a murmullar!
El partido entre Australia y Bélgica en las semifinales de la Liga Mundial de Hockey en Bruselas, Bélgica, fue la primera vez que dos árbitros de USA estuvieron a cargo de un evento de nivel superior juntos. Con Irene Presenqui como el árbitro de reserva, fue un momento único PAHF.
