Soy Micaela Sarzosa, tengo 14 años, soy chilena y vivo en Coquimbo en la IV Región de Chile (al norte de Chile). Tengo Osteogénesis Imperfecta (OI), enfermedad con la que nací y me hace estar en una silla de ruedas, pues recién estoy aprendiendo a pararme y caminar. Mi madre y hermano también la poseen, es una enfermedad que debilita los huesos, pues no absorben el calcio normalmente, y hace que éstos se rompan con facilidad sin ninguna causa aparente.
Desde este año 2015, soy alumna regular del Amazing Grace English School de la Serena, pues sufrí de “bullying” en mi Colegio anterior. En este nuevo comienzo me he sentido aceptada, me he adaptado bien y no me he sentido discriminada.
En el Amazing Grace, el hockey sobre césped es un deporte que está en su malla curricular, además de tener una academia extra-programática de hockey. Mi profesora me invitó a participar de esta, donde mis compañeras y Familia finalmente me apoyaron, pues es una disciplina que jamás había hecho, pero que desde un principio me atrajo mucho. En un principio, la idea era participar de la academia de Natación, algo conocido para mí y que he desarrollado antes, razón por la cual a mi Familia le costó aceptar mi decisión de jugar hockey, por temor a que me pudiera hacer daño y sentirme mal, pues soy la única en una silla de ruedas jugando y esto significa grades cambios en cómo debo hacer hockey, y cómo deben hacer hockey el resto de mis compañeras dentro de la cancha. Me he sentido muy bien hasta ahora y al ver esto mi Familia, como me he sentido jugando, han logrado entender y aceptar mi decisión.
Quisiera seguir jugando por mucho tiempo más, necesito muchos accesorios para seguir desarrollándome en este Deporte, como una silla de ruedas deportiva y no la tradicional que utilizo, tampoco una eléctrica, pues este es un país sísmico y ante cualquier emergencia, lo liviano de mi silla marcará la diferencia. Chile, aún no es un país preparado para las personas con necesidades especiales como yo, pero que mi ejemplo pueda dar esperanza a muchos otros que están en mi misma situación, viendo este Deporte lejano e imposible de practicar. Yo tengo claro cuales son mis limitaciones, pero conozco mi fuerza interior, quiero mostrarles a los demás que se puede, yo he sido integrada a un juego tipo indoor y creo podrían haber más instancias integradas y paralímpicas.
Por ahora, seguir jugando y tal vez prepararme en la carrera de JUEZA de hockey, esos son mis próximos pasos. Les dejo mi historia, para que con ella se incentiven otros jóvenes americanos a practicar e integrarse a este hermoso Deporte.
